Si dejamos que la política caiga en desgracia y se desprestigie sin remedio, nos quedamos sin sueños, sin proyectos, sin revoluciones. Nos quedamos desamparados frente a la barbarie.
El reciente cambio demográfico, con una caída en los nacimientos anuales de 47.000 en 2015 a 31.000 en 2023, nos da una oportunidad histórica para dar el salto cualitativo y universalizar las experiencias de Tiempo Pedagógico Extendido en las escuelas públicas urbanas.
No se plantea que la desocupación crónica, la carestía y la marginalidad sean factores que debamos sacar de nuestro radar, pero en las últimas décadas hay que empezar a mirar hacia otro lado.
El Codicen haría bien en basarse en la experiencia docente y en la investigación académica cuando toma decisiones, en lugar de dejarse llevar por su ideología política.